20.3.08

Nueve nombres, una misma historia (*)

Por Nahuel Lag. Auno, 20 de marzo de 2008.- La estrecha relación con la presidenta María Estela Martínez de Perón le permitió al entonces ministro de Bienestar Social José López Rega disponer de parte del aparato estatal para crear la Alianza Anticomunista Argentina (AAA o Triple A) y perseguir a la militancia del ala izquierda del peronismo. La violencia que partió desde ese grupo parapolicial durante el gobierno democrático de "Isabelita" había actuado en Lomas de Zamora, pero desató toda su ferocidad la noche del 21 de marzo de 1975.

Ese día, según los testigos, 16 "lanchas" (autos) con cuatro hombres cada una llevó a cabo el operativo que recorrió Temperley este para buscar al concejal de la Juventud Peronista (JP), Héctor Lencina, y a varios más, entre los cuales estuvieron Héctor Flores, Aníbal Benítez, Germán Gomez, Eduardo y Alfredo Díaz, Omar Cafferata, Gladis Martínez y Rubén Bagnina.

Héctor Flores era el referente del barrio "Los Pinos" y se acercó a la JP --representada institucionalmente por los entonces concejales Héctor Lencina, César Dolinsky y Hugo Sandoval-- cuando se organizó la toma de un complejo de viviendas en ese barrio. Pero la relación no duró demasiado. Irma Santacruz, entonces vicepresidente del Concejo Deliberante (que había obtenido su banca por la JP, de la que luego se alejaría) lo tentó para ser su secretario. Flores aceptó y esto lo ubicó más cerca de ella y del sector que respondía a Eduardo Alberto Duhalde, que ejerció la intendencia luego de que fuera destituido Pablo Turner, militante de la JP. Santacruz dijo alguna vez que cuando la Triple A se llevó a Flores de su casa, en realidad la habían ido a buscar a ella... De todos modos, su secretario estaba tildado en las listas negras; algunos testigos hablan de peleas y discusiones directas entre él y los dirigentes del sector más ortodoxo del peronismo.

Aníbal Benítez, cafetero del Concejo Deliberante. Ese era el trabajo que los concejales de la JP le habían conseguido para que no siguiera desempleado. Benítez conocía a Héctor Lencina del barrio, del trabajo que como militante de la JP realizaba. Había participado de las tomas de los hospitales Estévez, Español, Gutiérrez (hoy Alende) y Gandulfo, colocando interventores que regularizan la atención de los pacientes de una manera acorde al presupuesto que parecía quedar siempre entre los directivos. La noche de la masacre estaba en la casa de Lencina, quizá compartían un cafecito mientras veían un partido de Independiente. Y tal vez Gloria, la mujer de Aníbal, estaba cerca de ellos atenta a su bebé de cinco días y a Alejandro, el hijo de Héctor.

Héctor Lencina fue uno de los más valiosos cuadros políticos de Lomas de Zamora. No bien asumió como concejal en mayo de 1973, conformó el bloque de la JP luego de renunciar a la presidencia del Frejuli, el espacio que aglutinó a todo el justicialismo. Esta fractura enfrentó en las tablas a dos sectores del peronismo; Lencina era el referente de la JP y Eduardo Alberto Duhalde pasó a serlo del ala más ortodoxa. El día de la masacre, Lencina estaba en la casa que alquilaba y cuya entrada tenía un pasillo lindero al bar de don Pascual. La "Orga" (Montoneros) le había advertido "levantar" (desocupar) esa casa. Esa noche, en el bar, los clientes estaban boca abajo en el piso, tal como lo habían ordenado los matones de la caravana de la AAA. Héctor pudo haberse resistido y morir en combate; Aníbal no era un cuadro militar. Sin embargo, el motivo por el que se entregaron fue la presencia de sus hijos. Lencina y Benítez fueron subidos a los autos. A Alejandro lo rescató su madre, que había estado dando vueltas por el barrio ante la advertencia de lo que sucedía; los dos fueron llevados a Morón. Gloria y su bebe fueron llevados por Hugo Sandoval, mientras Dolinsky cumplía la tarea de reconocer los cuerpos de sus compañeros.

Germán Gómez y los hermanos Alfredo y Eduardo Díaz. Gómez, mayor en edad, estaba más comprometido con la agrupación, y como cuadro político en formación representó Santa Rosa en las reuniones que el Consejo de Juventud lomense de la JP realizaba en distintas zonas con dos representantes por barrio. Los hermanos Díaz tenían edad para estar en la Unión de Estudiantes Secundarios (UES), pero debido a sus empleos colaboraban con la JP desde el barrio; y aquí fue donde conocieron a Lencina. Daban una mano en la salita de primeros auxilios que ellos mismo habían construido al lado de la casa del concejal; compartían asado, falda y corazón con un poco de vino y guitarras junto a Héctor, Sandoval y Dolinsky. La comida y la música eran el recreo luego de reparar un cruce de calle, extender una red de agua o arreglar una vereda; entre la (dama)"Juana" de vino, la pala y la música surgían las consignas. Las compras de los materiales de obra se realizaban, la mayoría de las veces, con fondos de la comuna. Los trabajos se hacían luego de que los concejales de la Juventud consultaran a los vecinos sobre los déficit del barrio. Otras veces, los materiales eran aportados por los adherentes a la JP, como Germán Gómez, que daba una mano luego de volver de su trabajo en el puerto. Los hermanos Díaz se encargaban de organizar torneos de fútbol que permitían juntar el dinero para más obras; ambos vieron cómo "reventaban" la casa de Lencina y corrieron a advertirle a Gómez, pero fue tarde porque la Triple A ya había ido por él.

Omar Cafferata, Gladis Martínez, Rubén Bagnani. Los tres eran "compañeros de la JP", así los reconocían en el barrio San José, donde tenían una casa sobre la calle Salta, aunque su trabajo territorial no fuera allí. Omar y Gladis estaban casados y llegaron a Temperley escapando de los servicios de inteligencia. Junto con Rubén, habían "levantado" casa tras casa desde la Capital Federal. Sus secuestros fueron la última parada antes de que los 16 autos se detuvieran en el baldío de Sánchez y Santiago del Estero, en José Mármol, e hiciera explotar sus cuerpos y los de sus otros seis compañeros.

NL-AFD
AUNO-20-03-08

http://www.auno.org.ar/leer.php/3766

(*) Nota Principal:
http://www.auno.org.ar/leer.php/3767

14.3.08

Una asamblea vecinal en Puente La Noria para reclamar obras hídricas y seguridad

Organizaciones de los barrios más perjudicados por la lentitud en las obras de los arroyos de la cuenca Matanza-Riachuelo y en las calles del distrito reclamaron "Basta de mentiras" al municipio. El Foro Hídrico de Lomas de Zamora disintió con los actores políticos que la convocaron.

Por Nahuel Lag. Auno, 14 de marzo de 2008.- Unos 200 vecinos que integran organizaciones sociales y políticas y asambleas barriales se reunieron en Puente La Noria para reclamar "Basta de mentiras, inundaciones e inseguridad" al Ejecutivo municipal por la falta de obras hídricas y de mantenimiento vial, y piensan llegar con un petitorio hasta el Concejo Deliberante local.

Las organizaciones barriales y vecinales de los barrios más carenciados del distrito vienen reclamando hace varios meses por calles sin asfaltar, arroyos sin mantenimiento, falta de obras hídricas, problemas de desagüe pluvial, carencia de redes cloacales y de agua potable.

"Estamos cansados de la falta de respuestas del intendente Jorge Rossi, por ese motivo nos organizamos en asamblea para hacer escuchar nuestros reclamos, para que las autoridades se enteren cuánta necesidad hay en los barrios", fustigó Alberto Larez, organizador de la movilización, miembro de Barrios de Pie y ex candidato a concejal por la lista que tenía a Fernando "Chino" Navarro como candidato a intendente.

El reclamo se extendió también a la "inseguridad" cuando vecinos de Fiorito y Villa Centenario recordaron sus demandas por el cambio de recorrido de las líneas 28 y 283, que dejaron a miles de personas sin servicio con el argumento de repetidos robos y el mal estado de las calles.

"Creemos que con la participación popular podemos mejorar la calidad de vida de la gente de Lomas. Cada vez que vamos individualmente a pedir al municipio que atienda nuestros reclamos no nos atienden, o nos dicen que no hay recursos", denunció Larez.

Una vez finalizada la protesta, las organizaciones de la asamblea se reunieron para votar los pasos a seguir y coincidieron en avanzar en un petitorio dirigido al Legislativo local, que cuando comience a sesionar en abril podría darle un impulso elevándolo al Ejecutivo como proyecto de comunicación.

Marcela Val, referente de la organización "Che Pibe", adelantó a AUNO que junto con la asamblea "vamos a presentar el petitorio con los problemas y las propuestas de todos los barrios y que el cuerpo de concejales muestre de que lado está".

Val aclaró que se llegó a la instancia de acudir directamente al Concejo Deliberante porque ante los pedidos de audiencia "el Ejecutivo nos derivó a los subsecretarios y nunca terminaron de cumplir en tiempo y forma con lo que prometieron".

La asamblea estará presenta en el Concejo cuando el cuerpo deba votar qué hacer con el petitorio y se encontrará con un panorama favorable al actual intendente, ya que de cara a la reorganización del Partido Justicialista local, Rossi recibió el apoyo del bloque del FPV que lo fortaleció en el Legislativo.

La asamblea une a organizaciones de los barrios La Loma, Santa Marta, Las Heras, Ingeniero Budge, Villa Albertina, Villa Amelia, Villa Constitución, San José y Santa Catalina, además de la CICOP, que viene reclamando sobre el mal estado del hospital Allende de Ingeniero Budge, y Barrios de Pie, que tiene como referente al concejal Claudio Morell, recientemente separado del bloque del Frente para la Victoria.

La presencia de estos movimientos políticos tan cercanos a las internas por la presidencia local del PJ hizo que el Foro Hídrico de Lomas de Zamora --principal organización vecinal en referencia a la problemática de las inundaciones-- disienta con la metodología de organización.

"Para empezar, no nos invitaron; y la protesta fue organizada por algunos punteros que trabajan en Barrio de Pie y junto a Fernando Navarro", criticó Víctor Frites, referente del Foro.

"Empiezan a tratar los problemas de la gente cuando hay una interna del PJ, pero la gente tiene problema todos los días. Creemos que tiene que ser una lucha continua", añadió.

Asimismo, Frites explicó que muchas organizaciones que participan de la asamblea "compartieron protestas" con el Foro, y "no hay problema" de trabajar en conjunto "mientras se respete la decisión de los vecinos". Para esta protesta "organizaron y después convocaron", finalizó Frites.


NL-AFD
AUNO-14-03-08

http://www.auno.org.ar/leer.php/3746

12.3.08

La Policía impidió que vecinos de Cuartel IX entregasen un petitorio en Casa de Gobierno

Fue en Plaza de Mayo en el marco de un reclamo por obras públicas frente a la sede del Ejecutivo nacional. La Policía Federal y la Infantería evitó que los manifestantes dejaran una carta dirigida a la Presidenta. La protesta se hizo frente a la Catedral metropolitana, a cien metros de Casa Rosada.

Por Nahuel Lag. Auno, 12 de marzo de 2008.- Vecinos de Budge y Fiorito denunciaron que fueron "maltratados" por la Policía y la Infantería al intentar realizar un abrazo a la Casa Rosada con el fin de entregar un petitorio para la presidenta de la Nación, Cristina Fernández, a causa de la falta de respuesta por parte de los ejecutivos provincial y municipal a los problemas hídricos.

Unos 200 vecinos de organizaciones sociales de Budge y Fiorito detuvieron los colectivos, tomaron las pancartas que rezaban: "Cristina, no queremos más aguas en nuestras casas, queremos obras", y se agruparon en el mástil frente a la Casa Rosada. Pero un policía se acercó y fustigó: "Acá no se puede manifestar".

La protesta llegó hasta la Plaza de Mayo luego de que la Asamblea Vecinal de Campoamor y Recondo se reuniera con ejecutivos municipales para acordar "un acta de compromiso de trabajo" que no se cumplió, según indicó Armando Chávez, referente de la organización.

Los vecinos intentaron resistir, pero tuvieron que correrse hasta el segundo vallado, que corta en dos a la plaza, a la altura de la Catedral de Buenos Aires, desde donde podían protestar.

A pesar de que se les impidió manifestarse cerca de Casa de Gobierno, los vecinos se esperanzaron al lograr que la Policía dejara pasar a sólo cinco de ellos para alcanzar el petitorio. Pero quien se disponía a recibirlo no era un empleado de la Mesa de Entradas, sino un agente detrás del primer vallado de seguridad, a metros de la puerta de ingreso.

Ante la negativa de recibir el petitorio para la presidenta, los manifestantes intentaron regresar a los micros caminando hacia el puerto por la calle Rivadavia con la intención de elevar sus pancartas al pasar por el costado de la Casa Rosada. Esta vez no estuvo la Policía para impedirlo, sino la Infantería.

"La Infantería se nos adelantó. Unos 20 de ellos se formaron en línea y se pusieron los cascos, nos intimidaron con palos. Parecían tortugas ninjas", contó Chávez.

Esta no es la primera vez que los vecinos de la Asamblea no obtienen respuestas de parte de las autoridades, por lo que Chávez aseguró que "hay indignación en la gente, nos quitan el derecho a reclamar y vamos hasta la Casa Rosada y nos maltratan".

Los vecinos habían logrado reunirse con el secretario de Obras Pública, Julio Massara, y susecretario de Asuntos Hídricos, René Chávez, el 12 de febrero pasado para acordar un acto de compromiso de trabajo, que contenía diez puntos de acción.

Pero según el referente de la asamblea vecinal, el municipio comenzó con los dos primeros puntos acordados una semana después de la reunión para abandonarlo a los pocos días de ejecución, dejando "cráteres" sobre la calle Recondo. "En el municipio no nos dan pelota", explicó Chávez en referencia a los reclamos efectuado ante las autoridades.


NL-MFV
AUNO 12-03-08

http://www.auno.org.ar/leer.php/3738

7.3.08

Mujeres peruanas por los derechos de las que "eligieron" vivir en Argentina (*)

Por Nahuel Lag. Auno, 7 de marzo de 2008.- Desde 2003, la asociación busca nuclear en mujeres peruanas y bolivianas para afrontar los principales problemas que sufren luego de tener que salir de sus países de origen por persecución política o problemas económicos.

En el marco del Día Internacional de la Mujer, Olinda Pérez, miembro del INADI y de una asociación que trabaja en cuestiones de géneros para inmigrantes bolivianas y peruanas consideró que, respecto de otros países, en la Argentina "se respetan los derechos de la mujer", pero reconoció que en la cotidianeidad "la sociedad no las entiende".

Asociación de Mujeres Peruanas Unidas, Migrantes y Refugiadas se formó en Argentina en 2003 y nuclea a mujeres de Perú y Bolivia para "concientizarlas" sobre los principales problemas que enfrentan al vivir lejos de su tierra: la explotación laboral, la violencia familiar, los embarazos adolescentes, el desarraigo y la traba en los trámites de documentación.


La asociación tiene inscriptas a 150 mujeres que se reúnen en las sedes que posee en las villa 14, 31, Paternal, el barrio porteño del Abasto y la localidad bonaerense de Glew para quienes día a día se acercan para denunciar sus problemas, dialogar, realizar talleres en distintas temáticas y recibir asistencia jurídica laboral.

En el hipotético caso de que todas las mujeres argentinas gozaran de la plenitud de sus derechos sin ser discriminadas, el país aún estaría en deuda con las inmigrantes que son parte del 1,5 millón de extranjeros que vive en Argentina.

La cantidad total de inmigrantes significa el 4 por ciento de la población total de Argentina, y el 60 por ciento proviene de países limítrofes, según el censo poblacional de 2001.

Entre el grupo de 150 mujeres inscriptas en la asociación, están quienes han llegado a la Argentina como refugiadas desde Perú, tras escapar del virtual régimen dictatorial que en la década de 1990 llevó adelante el ex presidente de facto Alberto Fujimori.

La presidenta de la organización, Olinda Pérez, consideró que ante la discriminación que recae sobre las refugiadas, "ellas tratan de resguardarse porque quedaron con miedo y la sociedad no las entiende".

No fue sólo la crisis social lo que obligó a miles de peruanas a migrar a la Argentina, también hubo otro factor, el económico, que a la vez es el problema principal de las ciudadanas bolivianas.

Pérez consideró que los casos de explotación en talleres textiles que fueron descubiertos están relacionados con las necesidades económicas y los réditos monetarios que implican trabajar en la Argentina respecto de sus países de origen.

El problema es que ante esta situación, ellas "a veces permiten explotarse hasta por compatriotas", y es por esto que desde la asociación "se trata de concientizar a la mujer migrante sobre el deseo de trabajar con dignidad", indicó.

Aún así, Pérez reconoció que "hay avances en el área laboral, ya que hay casos de médicas peruanas en los hospitales porteños", aunque reparó en que muchas mujeres aún dependen de "la buena voluntad de algunas jefes que le pagan en blanco".

Otros de los dramas para las extranjeras es el desarraigo de sus familias: "Hay muchos casos de madres adolescentes que se encuentran solas para criar a sus hijos", añadió Pérez.

Para hacer frente a esta problemática, la asociación busca los medios para el regreso de ésas madres a su país de origen. "Argentina es un país donde se respeta los derechos de la mujer y el niño, a diferencia de un país machista como Perú".


NL-AFD
AUNO-07-03-08

http://www.auno.org.ar/leer.php/3767

(*) Nota principal:http://www.auno.org.ar/leer.php/3724


2.3.08

Educar al barrio para transformar la realidad (*)

Son dos propuestas que se aplican en Cuartel IX, una en Fiorito y otra en Budge, los barrios más pobres del distrito. Trabajan sobre la base de las necesidades cotidianas de los chicos y sus familias, e incluyen temas que no desarrollan en profundidad las currículas oficiales.

Por Ailín Bullentini y Nahuel Lag. Auno,2 de marzo de 2008.- A partir de la utilización de alternativas lúdicas y una propuesta de acercamiento a la realidad de los chicos, “Brazos Abiertos” es uno de los ámbitos en Ingeniero Budge que hace real la posibilidad de aprender y adquirir conocimientos desde un lugar distinto al que propone el método de enseñanza oficial. Con el mismo sustento teórico tomado del pedagogo brasileño Paulo Freire, la organización Che Pibe, de Fiorito, propone contenidos distintos a los del colegio: historia y actualidad de los pueblos originarios, derechos humanos, militancia social, ciudadanía y derechos de los chicos en tanto sujetos políticos son los ejes de su propuesta pedagógica.

Siguiendo el camino de la “educación popular”, el trabajo que llevan a cabo los docentes de “Brazos Abiertos” no gira sólo en torno a la lectoescritura, sino que busca brindar a los chicos “herramientas para que puedan desarrollar un pensamiento reflexivo respecto de la realidad que los rodea”, aseguró Eva Llul, maestra de primaria y una de las fundadoras de la asociación civil.

El nacimiento de este espacio fue luego de la crisis que estalló en 2001, cuando Eva junto con otras cuatro colegas decidieron utilizar los juegos en la educación para intentar una solución a un problema que las tomó por sorpresa: “Los chicos se nos dormían en clase. Trabajaban con los padres de noche juntando cartón, así que usar el mismo método de la escuela no tenía sentido”, analizó.

Si bien la asociación trabaja de una forma distinta los mismos contenidos que los chicos ven en la primaria, la estructura de enseñanza es diferente porque aunque “los contenidos son los mismos, nosotras estamos abiertas a las problemáticas de los chicos, entramos en contacto con su realidad”, explicó.

La asociación está ubicada en Campoamor y Baradero, muy cerca de las escuelas primarias 64, 58 y 82. Recibe a niños y niñas de entre seis y 12 años que asisten tres veces por semana a contra turno del horario escolar.

“Las maestras nos empezaron a conocer porque los mismos chicos les contaban de nosotras”, comentó la docente. Hoy, asegura que hacen “una especie de trabajo en conjunto” con los establecimientos estatales, aunque no mantienen un vínculo formal.

Para Eva, el modelo de educación popular se diferencia del oficial en que el suyo “busca el contacto cercano con los alumnos y con su contexto, se comparte el lenguaje y se trabaja con las problemáticas reales por las que atraviesan”; y en su visión, “el docente no puede mantenerse al margen del mundo de esos chicos”.

Además de aprender, los pibes reciben una merienda y trabajan en un salón junto a las seis maestras voluntarias. Pero esta experiencia no es la única razón de la existencia de Brazos Abiertos: el año pasado partió la idea de trabajar en un programa de alfabetización de adultos regido también por los pilares del modelo de educación popular.

El trabajo con adultos “tampoco se limita a la lectoescritura, sino que tratamos de bajar a su realidad todas las actividades que realizamos con ellos”, sintetizó.

Es por esto que Eva nota que para ellos las clases son “una vía de escape porque se sienten escuchados” y porque “el maestro primero les presta la oreja y después elabora el plan de clase”; es decir que en “Brazos Abiertos” no sólo se les abren las puertas del conocimiento, sino que también se les brindan “herramientas para abrirse un camino a la vida”.

EDUCANDO CON LA HISTORIA QUE NO PROFUNDIZA LA ESCUELA
En la organización Che Pibe, de Fiorito, aparte de trabajar con lo que “traen en la carpeta” de la escuela, los educadores del “apoyo” enseñan con una currícula en la que se toman en cuenta “fechas históricas que hacen a nuestra idiosincrasia, como el 24 marzo”, aniversario del último golpe de Estado y del comienzo de la represión a militantes sociales, contó Marcela Val referente de la organización.

En esta línea, los temas que los chicos tratan en sus horas de educación no formal tiene que ver con los pueblos originarios, la ciudadanía y “la agenda que nos pone el barrio con los problemas del barrio; esto es puro Freire”, interpretó Marcela.

Aquí, cuando los chicos cuando llegan de la escuela, el 11 de septiembre no continúan con los festejos del “Día del maestro” sino que se discute sobre el proyecto político encarado por Faustino Sarmiento; ocho días después, el 19, hay festejos por el “Día del educador”, recordando el día de nacimiento de Freire; y no se pasa por alto recordar al pedagogo suizo-argentino Enrique “Pichón” Riviére.

El trabajo en Che Pibe excede a la educación y realiza actividades integrales, como un trabajo cultural que va de la mano con el aprendizaje en cuestiones de salud y para el cual cuentan con la ayuda del grupo “Tatu”, doctoras cubanas que realizan un chequeo general e informes de nutrición.

La organización lleva 20 años de trabajo. En ella funcionan un espacio de apoyo escolar con una pedagogía íntimamente ligada al concepto de educación popular, una escuela materno infantil a la que asisten 250 chicos y chicas con sus familias, y hasta una salita de lactantes hasta preescolar en dos turnos. Para aquellos que dejan atrás los 5 años y entran en el primer grado está la “Casa del niño”, donde se les brinda apoyo escolar a los chicos de hasta de 12 años a contraturno del horario escolar.

“Lo que tratamos de hacer es un trabajo comunitario, una construcción de ciudadanía con los chicos, y con ellos a veces llegamos a los padres, porque muchas familias están desmembradas por problemas laborales, o sumergidas en valores de consumo, individualismo”, describió Marcela.

En esta construcción de ciudadanía y de una pedagogía que acompañe la realidad del barrio, la organización tiene también “La casa del joven” donde asisten más de 40 chicos de 13 a 19 años que durante el día deben trabajar, en su mayoría como cartoneros.

Otro de los programas que se realiza en conjunto con la Dirección General de Escuelas bonaerense es el taller de oficio de “maestro panaderos”, que funciona en la panadería que la organización tiene en su sede de Milán y Baradero.

“Todas las experiencias estás por fuera de la educación formal, los chicos vienen a Che Pibe por que les gusta; no hay asistencia, ni obligatoriedad”, aclaró Marcela para explicar cómo es la relación entre los educadores y los “educandos”.

Para llevar adelante este giro en la relación entre quienes aprenden y quienes enseñan, así como también las ideas que se discuten en el ámbito educativo, Marcela explicó que “en la organización funciona la escuela de `educación popular´, que es para los maestros que egresaron de los institutos de `desformación´, pensando en recibirse para tener un laburo y seguir el manual de moda”.


AMB-NL-AFD
AUNO-02-03-08

http://www.auno.org.ar/leer.php/3692

(*) Nota principal:
http://www.auno.org.ar/leer.php/3694