30.11.09

Búsqueda


Se llama Federica. Vive en el barrio de Boedo. La buscan desesperadamente. La familia exige la actuación policial.

Sociedad-Página/12, 30 de noviembre de 2009.- El sábado a las 16, Federica, de 12 años, le pidió permiso a su mamá para dar una vuelta a la manzana con un amigo del barrio que la esperaba en la puerta del edificio, ubicado en Inclán y Muñiz, en el barrio de Boedo. Horas más tarde, el chico aseguró que Federica no lo había llamado y que hacía un mes que no veía a su amiga. Una señora del piso trece dijo que estuvo con ella a la tarde. El portero asegura que no la vio salir. Pero Federica no aparece. Ayer, los vecinos realizaron un corte de calle sobre avenida La Plata para pedir por su aparición.

Las hipótesis son dos: que la chica permanezca dentro del edificio de 20 pisos –dos vecinos escucharon gritos en la tarde del sábado– o que se haya encontrado con un hombre al que conoció por chat, mintiéndole a la mamá sobre el encuentro con un amigo. Hasta la tarde de ayer, la policía no había comenzado una búsqueda. La familia presentó un hábeas corpus para acelerar los procedimientos, solicitó un patrullero en la puerta del edificio y la intervención de un perito informático para revisar el historial del chat de la niña.


Camisa, pantalón y zapatillas negras, con cordones rojos; Federica salió del departamento en el que vive con su mamá y no regresó ni llamó para avisar dónde está. “Me llama la atención que no haya llamado, no es de andar sola, y si le digo una hora, me llama para decirme que la vaya a buscar”, dijo a Página/12 Claudia Barriento, madre de la niña.


“Fui a hacer la denuncia a la 10ª y no me la quisieron tomar porque dijeron que no les pertenecía la zona, y en la 34ª la registraron, pero me advirtieron que tenía que esperar cinco días”, señaló decepcionada la madre y docente. Varios colegas se acercaron al edificio de Boedo para comenzar a golpear puerta por puerta y recabar información sobre Federica, cuando el amigo con el que se debía encontrar reconoció no verla hace un mes.


El portero aseguró no haber visto a Federica salir del edificio; una señora que vive en el piso trece indicó que la vio cerca de la hora en la que desapareció, porque la chica le realizó una encuesta para la escuela, y dos vecinos indicaron escuchar el grito de un chica joven, minutos más tarde. Con esas pistas, la abogada de la familia, Silvana Graciano, solicitó ayer a la comisaría que coloque una custodia permanente en la puerta del edificio, en el que ingresan y egresan habitantes de 300 departamentos.


“En los departamentos hay muchos inquilinos, el cambio de gente es permanente. Alguien puede pasar inadvertido, entrar y salir sin ningún control”, graficó la abogada. Por eso, otra de las medidas que se tomaron fue solicitar a la Administración los registros de los inquilinos, y, en especial, los de aquellos que tienen alquiladas cocheras con acceso directo desde dentro del edificio.


La otra hipótesis es que Federica se haya encontrando con un hombre, oriundo de Palermo, que concoció por chat y con el que ya se había visto una vez. La chica había cambiado la contraseña de su computadora para evitar los controles de su mamá y por la misma razón le podría haber mentido sobre el encuentro.


Para avanzar sobre esta línea de investigación, Graciano solicitó al Juzgado de Instrucción 26 –que modificó la carátula de la investigación de “protección de persona” a “averiguación de ilícitos”– la intervención de un perito informático para decodificar la contraseña y acceder a los historiales de las conversaciones que indiquen “con quién hablaba y de qué”, apuntó Graciano.


Por su parte, el Registro de Chicos Perdidos porteño se puso en contacto con la comisaría y la fiscalía a cargo para facilitar la información que reciba de la línea 102. Además, esperan reunirse hoy con la madre de Federica para tener la autorización e iniciar una campaña en la vía pública con la foto de la niña.


Informe: Nahuel Lag.


http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-136192-2009-11-30.html

27.11.09

Proyecto y polémica

“Parece primar más el apuro por los pedidos de seguridad que los derechos de los niños.” La frase resume la posición de buena parte de las organizaciones sociales frente a la media sanción que el Senado dio el miércoles al proyecto de ley de Responsabilidad Penal Juvenil. La aprobación del Senado desató una polémica entre quienes rechazan la baja de edad de imputabilidad, que propone el proyecto, y quienes la defienden sosteniendo que no se trata de una baja de edad y que el proyecto instrumenta garantías sobre una franja de adolescentes castigados por la policía y que son detenidos sin blanquear. Algunos acuerdan en que el proyecto representa un avance en garantías procesales aunque desconfían de su cumplimiento.


“La ley significa un paso adelante en el sentido que contempla y mejora las garantías procesales de los chicos y crea estructuras de probation y medidas socioeducativas como parte de las penas. Pero no se contemplan medidas de prevención que significa que los chicos accedan a sus derechos. Parece primar más el apuro por los pedidos de seguridad que los derechos de los niños”, indicó Nora Shulman, directora ejecutiva del Comité por los Derechos del Niño (Casacidn).


Respecto de la baja de imputabilidad, Laura Taffetani, integrante del Movimiento Nacional Chicos del Pueblo, que nuclea a cientos de organizaciones que trabajan por la infancia, apuntó que “colocar a los pibes como el problema de una inseguridad construida por los adultos es hipócrita. Significa la construcción de un enemigo interno, cuando como sociedad no existe la responsabilidad para brindarle a los chicos los insumos básicos para su crianza”.


En cambio, el diputado Emilio García Méndez, especialista en el tema, destacó que la ley permitirá “un debido proceso a los menores de 16 años que hoy están detenidos, ilegalmente, por medidas de protección”.


El proyecto con media sanción ordena que los centros en los que los adolescentes queden detenidos deberán ser dirigidos “por personal especializado y capacitado” y “en ningún caso podrán estar a cargo de personal policial”. Puntos como éstos son apoyados en forma unánime, pero muchos sospechan que la orden se transforme en “letra muerta”. Taffetani sostuvo que “esas condiciones también estaban indicadas en la Ley de Patronato (reemplazada por la Ley de Protección Integral Infantil) y no se cumplían”.


Según un informe de Unicef y la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, publicado en 2008, el 12 por ciento de los chicos permanecía privado de su libertad en centros policiales y el 21 por ciento en unidades penitenciarias. “Con un chico que llega a ser parte de un hecho delictivo es necesario trabajar con las herramientas que le permitan construir un proyecto, algo que en la cárcel no van a conseguir”, resaltó Taffetani.


Shulman advirtió que en Buenos Aires las leyes vigentes son “excelentes, pero no están funcionando. Tanto es así que están queriendo ir para atrás y ampliar el tiempo que los chicos pueden permanecer detenidos en las comisarías, porque ‘no tienen tiempo para investigar’. En la provincia de Buenos Aires no pueden formar los sistemas de protección por falta de presupuesto”.


“Cuando decimos que no hay pibes en conflicto con la ley es porque consideramos que es la sociedad, en conflicto social y económico, la que los lleva a un callejón sin salida”, apuntó Mario Espínola, referente de la organización Chicos del Sur, una de las que estuvo presente en el Senado para pedir “no a la baja de imputabilidad”.


“Los legisladores avanzan sobre este proyecto con muchísima desinformación. Viviendo realidades muy distintas a las de los pibes que mueren de hambre, que tienen falta de atención en salud. Nadie está legislando para terminar con el hambre mañana”, sentenció Espínola.


Informe:
Nahuel Lag.


http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-136023-2009-11-27.html

26.11.09

Se agranda algo que es menor


De acuerdo con cifras de la Procuración General bonaerense, la participación de los adolescentes en el delito es baja, a contramano de la sensación creada por algunos medios y voceros policiales.

Sociedad-Página/12, 26 de noviembre de 2009.- No importan sus historias previas repletas de derechos vulnerados: un día los medios de comunicación o la policía le ponen un apodo y un adolescente se transforma en el máximo escollo para terminar con la “inseguridad”. Sin embargo, los informes de la Procuración General de la provincia de Buenos Aires sobre las causas iniciadas en el primer semestre de 2009 indican que los menores de 18 años cometieron sólo el 4 por ciento de los delitos registrados en el nivel provincial, mientras que dentro de ese porcentaje sólo el 0,10 por ciento de los casos se trató de homicidios en ocasión de robo. “Antes de que los chicos empuñaran un arma hubo una ausencia del Estado social para acompañarlos en su desarrollo”, advirtió Claudia Cesaroni, del Centro de Estudios en Política Criminal y Derechos Humanos.

Al comparar los documentos que relevan la cantidad de Investigaciones Penales Preparatorias (IPP) iniciadas por los fueros de Responsabilidad Penal Juvenil bonaerenses y las fiscalías regulares, se obtiene que el total de delitos cometidos por menores de edad representan sólo un 4,06 por ciento. Entre los delitos graves cometidos por niños y adolescentes se registraron 127 causas por homicidio y sólo 14 por homicidio en ocasión de robo. Ambos tipos de homicidios sumados representan el 8,6 por ciento del total de crímenes cometidos en la provincia. Mientras que sobre el total de delitos, los registrados por homicidio en los fueros juveniles sólo representan un 0,04 por ciento.


“La tasa continúa siendo baja en relación con la tasa de homicidios cometidos por los adultos. Además, los casos no están relacionados al crimen de tipo organizado sino que, en su mayoría, son riñas y hechos de violencia entre personas de las clases sociales bajas por la falta de contención social”, resaltó Julián Axat, defensor oficial del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil platense. En relación con el tratamiento mediático de este tipo de delitos indicó que “se generó un fenómeno de victimización por parte de las clases medias” a partir de los resonantes casos del futbolista Fernando Cáceres y la arquitecta Renata Toscano.


Si se contempla el total de delitos contra las personas como lesiones culposas –198 casos– y leves, las causas iniciadas por participación de menores de edad alcanzan el 0,6 por ciento del total de delitos.


En un documento reciente elaborado por todos los defensores juveniles de los fueros provinciales, tomando como base los datos de la Procuración General, en el que se oponen al proyecto para aumentar las horas de detención en comisaría de los menores, indican que “la reforma se asienta sobre un panorama estadístico con cifras sin incidencia delictiva a nivel general” y agregan que se basa “más en el efecto e impacto que otorgan los medios de comunicación que sobre la incidencia delictiva real”.


El último gran “delincuente precoz” presentado por los medios es “El Angel”, un chico de 14 años que según se informaba tenía 60 causas iniciadas, cuando –como informó Página/12 la semana pasada– sólo once causas en su contra se habían iniciado ante la Justicia. Otro caso es el de “Josecito”, de 15 años, a quien le atribuían 43 detenciones, muchas de “dudosa legalidad”, según denunció Axat.


En diálogo con Página/12 el defensor indicó que el tratamiento mediático “generó un fenómeno de victimización” a partir de los resonantes casos del futbolista Fernando Cáceres y la arquitecta de Wilde, Toscano.


¿En qué medida participan los pibes en robos? Según las causas iniciadas por delitos contra la propiedad, los delitos simples como hurto y robo son los más numerosos cometidos por niños y adolescentes, con un 31 por ciento del total de las registradas por los fueros juveniles bonaerenses. Sin embargo, si se amplía al total de los casos de ése tipo delictivo a nivel provincial, en los primeros seis meses de 2009 los pibes estuvieron implicados en sólo el cinco por ciento de los casos. También se destaca que en sólo el diez por ciento de los casos en los que los menores de edad participaron de un hecho delictivo portaban armas.


“Lo que hay que analizar es qué hace que un pibe esté inserto en una situación de violencia. Para atacar las cadenas delictivas hay que buscar cuál es el adulto que lo mandó a robar, un tema que se aborda poco. Detrás de los grandes cadenas delictivas no hay pibes de 14 años; antes de que ellos empuñaran un arma hubo una ausencia del Estado social para acompañarlos en su desarrollo”, apuntó Cesaroni.


En ese sentido, el abogado integrante del Foro por los Derechos de la Niñez bonaerense, Marcelo Ponce Núñez, aseguró que “la violencia nace de la exclusión” e ironizó: “Las pistolas no se compran en la juguetería. Son los adultos los que compran y venden en un mercado negro, pero no se investiga y siempre el hilo se corta por la parte más delgada. Los mayores hacen el negocio y los chicos pagan las consecuencias”.


Los números del documento muestran que mientras se iniciaron 13.728 investigaciones contra menores de edad, los adultos participaron en un total de 324.249 casos, es decir, el 4 por ciento. Según datos del Ministerio de Justicia difundidos la semana pasada, en Argentina, el promedio de homicidios dolosos se ubica en el 5,3 cada 100 mil habitantes, mientras que el promedio en la región alcanza el 25 cada 100 mil.


Informe: Nahuel Lag.


http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/subnotas/3-43809-2009-11-26.html

23.11.09

Encuentro en el mar en clave de sol


Orquestas de chicos y adolescentes de Argentina, Paraguay, Brasil, Chile y Colombia se encontraron por iniciativa del Ministerio de Educación nacional. Los ensayos están dirigidos por el Programa Nacional de Orquestas y Coros para el Bicentenario.


Sociedad-Página/12, 23 de noviembre de 2009.- El viento húmedo y con sal, por la brisa que llega desde el mar, no es lo mejor para la afinación y conservación de sus violines, contrabajos, clarinetes, flautas y oboes, pero la emoción de tocar en todas partes es más grande que la cautela. Los tambores, bombos y timbales están fuera de peligro, son instrumentos más acostumbrados a estar al aire libre, en la calle de la música popular. En el auditorio donde ensayaban, en el teatro donde dieron los conciertos o en los parques y la playa donde siguieron tocando, los niños, niñas, adolescentes y jóvenes de Argentina, Paraguay, Brasil, Colombia y Chile vivieron una semana a puro ritmo en el Encuentro de Orquestas y Coros Infantiles y Juveniles para el Bicentenario en Mar del Plata. Los jóvenes músicos no sólo disfrutaron de talleres de intercambio y clases con referentes de la música, sino que mostraron en su máxima expresión cómo el arte es un derecho y un puente para la integración (ver aparte).


Dicen que el celular es el producto tecnológico más vendido en la historia y en las escuelas los prohíben porque los estudiantes se distraen. Pero, desde el martes y hasta el viernes, los más de 500 jóvenes músicos sólo cargaban entre las manos, celosamente, sus instrumentos, de un lado a otro en los enormes predios de Chapadmalal en los que se alojaron e intercambiaron experiencias, do, re, fa y silencios mediante.


Gerardo es tenor y desde mayo es parte del coro Re-fugio de Reconquista, Santa Fe, cuando la directora dio aviso de que la posibilidad de sumarse a la orquesta escolar estaba abierta. Gerardo dice que “desde chico tenía un don especial por la música y el dibujo”, por eso quiere terminar el secundario para estudiar en la Escuela de Arte local. El deseo pareció complicarse cuando abandonó la escuela porque sentía que “no pertenecía”. Pero con el cambio de institución y compartiendo la escolaridad con sus compañeros del coro volvió a empezar y todo parece tener futuro en clave de sol. Es que ésa es su pasión y el logo que los cincuenta jóvenes del coro diseñaron para que los represente demuestra que es la de todos: con una clave de Fa y una clave de Sol formando un corazón.


El auditorio en uno de los complejos de Chapadmalal no da abasto para el ensayo final de lo que fue, al día siguiente, viernes, el cierre del encuentro, cuando los jóvenes músicos tocaron en la famosa Rambla de Mar del Plata enmarcados en la fotográfica estatua de los lobos marinos. “¡Cómo va a sonar esto!”, adelantaba uno de los docentes de música de los 18 coros y orquestas, mientras ayudaba a ordenar la Playa Bristol, cubierta de sonidos y jóvenes intérpretes.
El encuentro de tantos instrumentos y pibes no es producto del azar sino de la iniciativa del Ministerio de Educación con el Programa Nacional de Orquestas y Coros para el Bicentenario, acompañado por los programas hermanos de Paraguay, Brasil, Chile y Colombia.


“Armar coros y orquestas juveniles con instrumentos de la tradición sinfónica en las escuelas es una práctica de varios años en América latina. En las escuelas orquestales los chicos reciben determinados tipos de hábitos que les sirven para su vida cotidiana y su escolaridad. En los ensayos los chicos tienen que escuchar a los compañeros, seguir la partitura, ver al director, llegar a acuerdos. Para muchos pibes significó mejorar en su escolaridad, reinsertarse en la escuela o sacarse la etiqueta de que no podían aprender, a partir de participar en un proceso pedagógico distinto”, explicó el ideólogo y coordinador del programa, Claudio Espector.
Como cada mañana, después de los talleres de cuerdas, metales y percusión y la clase especial a cargo de músicos como Verónica Condomí, Rubén Rada, Marcelo Moguilevsky o el Chango Spasiuk, pibes y pibas salen a disfrutar de sus minivacaciones a kilómetros de sus hogares y frente al mar, que muchos no conocían.


“Allá tenemos el dique de Cabra Corral que llena de agua los valles, pero el océano es inmenso, infinito parece”, graficó Juan que con sus 18 años dejó el taller mecánico en el que trabaja en las afueras de la capital de Salta para venir a tocar el contrabajo en la orquesta. “Tocando tantas personas juntas aprendés mucho del otro, te apoyás cuando te equivocás y se siente una energía fuerte en el pecho cuando suenan todos los instrumentos a la vez.”


La energía musical se sintió toda la semana y en el cierre la descargaron frente al mar sobre la rambla marplatense. En la famosa antesala a la Bristol, los pibes y pibas volaban de alegría, mientras que los coordinadores los ordenaban como en un aeropuerto, carteles en alto con la leyenda: maderas, cuerdas, metales, en los que los músicos se identificaban y formaban para hacerlos sonar en la última gran pieza.


Pero no será la última de sus incipientes carreras. Yésica cuenta que al volver a Santa Cruz la esperan tres giras artísticas más por la provincia, antes de finalizar el año.


–¿Vas a seguir en la orquesta cuando termines la escuela?
–Una vez que se descubre la música ya no se puede salir. Cuando termine la escuela voy a ir a estudiar al Colón para ser docente”, explica con sólo 14 años y una vocación.

Informe: Nahuel Lag

18.11.09

"Intensidades de Mujer" en el Bauen.-

El hotel recuperado por sus trabajadores fue el escenario donde algunas de las 18 mujeres presas o en libertad desde hace no mucho tiempo, junto con el ideólogo y coordinador del proyecto, el periodista Oscar Castelnovo, presentaron un libro que, además de compendiar cuentos, poemas y cartas escritas por ellas tras las rejas, pone a disposición de quien lo lea un informe sobre el estado de quienes habitan las cárceles bonaerenses.

Por Nahuel Lag
Fotografía de Sofía Lobo

Buenos Aires, noviembre 18 (Agencia NAN-2009).- “La Rusita” pasó casi dos años recluida en la Unidad Penitenciaria de Ezeiza y ahí se encontró con la literatura como un puente a la libertad. “Había que buscar una salida y yo encontré la libertad escribiendo”, recuerda. Es que hace tres años que consiguió caminar las calles y lo hace todos los días mientras se gana unos pesos paseando perros por la ciudad de Buenos Aires. Hoy habló con Agencia NAN sentada en una escalara, en las puertas del salón de eventos del Hotel Bauen, mientras esperaba que llegaran los invitados a la presentación del libro Intensidades de Mujer, una producción que recopila aquellos textos que la ayudaron a “salir de adentro” junto a los de otras 18 mujeres que fueron sus compañeras. Textos que hablan de la bronca de los derechos vulnerados, de la pasión del amor tras las rejas y de las ansias de Libertad, aunque algunas de ellas siguen recluidas.

Oscar Castelnovo es coordinador e ideólogo del libro que dedica “a las chicas de Ezeiza: Para la Libertad”. Oscar es periodista y llegó a conocer a todas las escritoras porque entra a los penales para tomar notas de sus historias y denunciarlas, pero también para brindar talleres periodísticos. Ese compromiso produjo que lo directivos del penal le prohibieran la entrada por nueve meses. Con “La Rusita” se conocieron en un colectivo cuando él iba comentando uno de sus textos publicado en una revista del penal y ella de visita al lugar donde “te inspira desde al maltrato hasta el no poder ver un atardecer”. Su manera de superarlo fue “escribir con ironía, escribir cuentos eróticos. Imaginate, ahí adentro rajas las paredes”, se ríe “La Rusita” de aquel pasado de pabellones repletos de mujeres donde la soledad no es posible, donde suena cumbia y rock and roll y donde los amoríos también existen.

En el salón ya están todos acomodados: amigos, familiares, integrantes de organizaciones sociales y de Derechos Humanos, militantes. La escritora en libertad se levanta y va a ocupar su asiento; está ansiosa por ver a sus compañeras que con el permiso de los jueces debían venir en micro desde Ezeiza. Entre ellas, “La Galle” --hija de desaparecidos, militante de H.I.J.O.S., condenada a 30 años por la justicia brasilera por un secuestro en el que quedaron dudas sobre su participación-- y Claudia Sobrero –condenado a cadena perpetua por asesinato, recibida de Socióloga dentro del penal e impulsora de talleres de arte--. No podrá hacerlo ya que, celadores y Servicio Penitenciario mediante, no lograron llegar al Bauen.

Tras la noticia, “La Rusita” reconocerá que no la sorprende. El cronista tampoco se sorprende cuando recuerda las palabras de la rubia que hoy tiene sus textos editados: “Una vez me encontraron un texto en la celda y me dijeron: ahora el pabellón se pone hippón”.

Está tapada con un velo blanco, no tiene rostro, no tiene identidad. Comienza a abalanzarse entre las rejas, comienza a abrir puertas: una, dos, tres, cuatro. Su rostro ya se ve, aunque tenso. También su cuerpo. Parece que es la última puerta. Se escuchan los pájaros, el aire en la cara. El cuerpo se descontractura. Recuperó su libertad. Es la actriz Mirta Israel interpretando cualquiera de los textos de las 18 mujeres.

Oscar toma la palabra y avisa que “este no será un acto protocolar toma-tú-que-te-toca-a-ti”. Y va a quedar claro, los focos iluminarán toda la velada a una mesa y a un juego de sillas que, ubicados en el centro del escenario, quedarán vacíos por el resto de la velada hasta el final. Los oradores subirán, tomarán el micrófono, dirán sus palabras de pie y bajaran a mezclarse entre el resto de los pares. Libertad.

La primera en tomar la palabra es María del Carmén Verdú, abogado integrante de la Correpi, que no dio vueltas: “En los últimos diez años la cantidad de presos en Argentina se duplicaron; estar preso es la segunda causa de muerte provocada por la fuerzas de seguridad estatales; el 39 por ciento no tiene condena; hay una hacinamiento del 700 por ciento”. Es que el libro no es sólo un compendio de los trabajos que ellas realizaron dentro del penal, sino que también cuenta con un anexo documental en el que se resume el Informe 2009 del Comité contra la Tortura sobre las cárceles bonaerenses y una entrevista a la directora Ejecutiva del comité.

“Wally” hoy está en libertad y en muletas llegó hasta el Bauen para participar de la presentación del libro editado por América Libre, en el que aparecen también sus textos. América Libre, a diferencia de la primera editorial que se encargaría de llevarlo a las calles, no puso reparos ni en las denuncias, ni en las escenas de amor lésbico de los cuentos. Toda la sala se mantiene en silencio mientras ella relata en primera persona uno de sus escritos, aquel en el que cuenta los encuentros en una pieza de Devoto con su esposo cuando él, como ella, estaba preso. “No sólo las cárceles tienen rejas, afuera también las hay. Cuando salimos nadie nos tendió una mano. El libro es importante para no nos prejuzguen”, explicó la mujer que estuvo dos años y nueve meses presa para luego ser sobreseída de culpa y cargo.

Lidia fue la tercera escritora que participó de la presentación y recordó que en el taller literario del penal “estaba más libre que los uniformados. Pero al salir sufrió la cadena perpetua” que impone la sociedad. A Lidia la rechazaron de 30 trabajos y participa del Foro de Encierro del Inadi por el reconocimiento de los derechos de los recluidos. “El dolor del encierro hay que expresarlo a través de libros o pinturas, es necesario”, resaltó.

Entonces, tanto hablar de textos y relatos dio sed de arte. La locutora Liliana Downes se hizo un lugar en el escenario para recitar la “Entrevista a un par de zapatos viejos”, de puño y letra de Belén, que lleva dos años en el penal de Ezeiza.

Pero no hay escritoras sin taller. Alcira Daroqui es una de las profesoras del taller literario del Penal. “Subo con el libro porque me sostiene”, aseguró. “La memoria sólo es posible al poner en diálogo el pasado y el presente. Y en el presente está este libro que es una puerta hacia el afuera, es una práctica de resistencia. Hay que celebrar la palabra”, escribió en el aire Daroqui.

Con tantas personas presentes que pelean con la palabra libertad como zanahoria no faltaron las referencias repetidas a Osvaldo Bayer, que no faltó a la velada. Según el historiador ya estaba todo dicho y documentado por los presentes y por un libro que hay que “promocionar para que se lea en las universidades y en el último año del secundario”. Entonces, fue sintético y resumió el espíritu de la producción literaria citando un fragmento del himno nacional: “ved en trono a la noble igualdad. Libertad. Libertad. Libertad”.

17.11.09

Que no sea otro Bulacio

Rubén Carballo, de 17 años, fue hallado en coma cerca del estadio donde fue el recital de Viejas Locas. La policía tiene una versión extraña. La familia denuncia que fue golpeado a bastonazos.


Sociedad-Página/12, 17 de noviembre de 2009.- La vuelta de la banda Viejas Locas en el escenario del club Vélez Sarsfield no sólo trajo un episodio de gente agolpándose para ingresar sin entrada. También llegó la represión policial con gases, balas de goma, palos y camión hidrante y un saldo de treinta heridos y 44 detenidos. Pasadas las 14 del domingo y después de llamar al celular de Rubén durante toda la noche, sin conseguir respuestas, su madre logró que atendieran el celular. No era Rubén, su hijo, sino una médica del Hospital Vélez Sarsfield que lo transportaba en ambulancia, inconsciente, después de recogerlo del predio en el que lo encontraron, a 600 metros del estadio al que había concurrido por el recital.

Rubén Carballo aún tenía la ropa teñida con el azul que desparramó el camión hidrante y la entrada del recital en uno de sus bolsillos cuando ingresó al hospital. Ayer, desde el Centro Gallego, donde fue derivado, un parte médico indicaba que estaba en “coma profundo”, con daños cerebrales por un golpe en el cráneo. Sus familiares y amigos dicen que al visitarlo vieron los golpes de los bastones y las balas policiales. El parte médico se limita a indicar que no se puede analizar la procedencia del golpe en la cabeza. La hipótesis policial supone que Rubén, de 17 años, habría trepado a la Autopista Perito Moreno y saltado hacia una red para luego treparse por un muro de la parte trasera del club. Con la entrada en su bolsillo. La Correpi relacionó el caso con el de Walter Bulacio y la Defensoría del Pueblo porteña comenzó una investigación (ver aparte).


Florencia es amiga de Rubén en el barrio de San Justo, partido de La Matanza, y ella estuvo con él “tomada de la mano para no perdernos”, contó en diálogo con Página/12. Junto con otros ocho amigos llegaron la tarde del sábado a las inmediaciones del estadio de Vélez Sarsfield y como buenos fanáticos de Viejas Locas se sumaron a la fila esperando utilizar la entrada que habían sacado hacía dos meses. La gente ocupó hasta cinco cuadras sobre Juan B. Justo para ingresar al sector campo por la única entrada que los organizadores del recital habían habilitado para el ingreso de gran parte de las 35 mil personas que colmaron el estadio.


Mientras esperaban al ingreso, un primer grupo de gente derribó el vallado que contenía la fila de miles de personas para “colarse” e intentar ingresar al recital sin entradas. “La gente te llevaba para todos lados, ni siquiera se podía hacer pie y tuve que salir de la fila por los gases que tiró la policía”, recordó Nahuel, otro de los amigos de Rubén. Entonces, parte del grupo decidió retroceder las cinco cuadras y comenzar a realizar la fila, otra vez.


Ya cerca de las 24, el grupo de Rubén, a una cuadra de la entrada, continuaba en la fila con pocas esperanzas. “De repente se sienten balazos. Pensábamos que, otra vez, eran problemas con la barra brava (que ingresó al estadio sin entradas). Nos quedamos quietos porque sabíamos que no teníamos nada que ver. Vimos que tiraban balas de goma y no al piso, para asustar. En un minuto, teníamos el camión hidrante tirándonos y nos avisaron que venía la montada por la vereda. Empezamos a correr, me resbalé con el líquido del hidrante y le solté la mano a Rubén. No lo vi nunca más”, relató Florencia, con las zapatillas todavía manchadas por el pegamento líquido del camión hidrante.


De lo que ocurrió después, por ahora sólo se conoce la versión policial. Las fuentes policiales aceptan que Rubén tenía su entrada, pero suponen que desesperado por no poder ingresar se dirigió hacia la autopista Perito Moreno a la altura del club Unión Ferroviaria. Entonces, desde arriba de la autopista se tiró hacia la red que cubre una de las canchas –a siete metros de altura– para luego descender hasta el suelo y utilizar una escalera para lograr pasar un muro que linda con el club Vélez Sarsfield y de allí al sector del campo. Según la suposición policial, el golpe en su cabeza podría haber sido provocado porque la red no resistió el peso y se rompió o porque en el salto Rubén golpeó contra un borde de la autopista.


Rubén Carballo, padre del joven internado, recibió la noticia de dónde estaba su hijo quince horas después del inicio del recital. Un grupo de personas del club lo encontraron tirado y dieron aviso. “Cuando llegué a la guardia del hospital, lo vi y tenía la pintura del camión que tiró hidrante en el cuerpo y la ropa, además tenía marcas de bastonazos y secuelas de balas de goma. La policía se dio cuenta de lo que había hecho y lo tiró en ese lugar”, indicó el padre, descreyendo de la versión policial que ya le había dado el subcomisario de la 44ª, encargada de la seguridad del evento.


“Hay testigos que vieron la golpiza. Qué necesidad iba a tener él de realizar esa maniobra imposible cuando tenía la entrada. Yo voy a saber cuáles fueron los responsables del estado de mi hijo. Ahora, quiero concentrarme en él y tengo la esperanza de que se recupere”, afirmó el padre.


Informe: Nahuel Lag.


http://m.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-135423-2009-11-17.html

13.11.09

Los desnudos que trajeron cola

Sociedad-Página/12, 11 de noviembre de 2009.- La Mutual Sentimiento presentará una denuncia contra el jefe de la Comisaría 2ª de la Policía Federal, Mario Morales, por los delitos de “lesiones, privación ilegítima de la libertad, abuso de autoridad y violación de deberes de funcionario público”. La presentación se basa en que Morales ordenó el lunes un operativo con palos, gases y detenidos en Plaza de Mayo porque seis integrantes de la organización se desnudaron para protestar contra el desalojo del edificio en el que realizan actividades sociales y culturales desde hace diez años. Durante la sesión de Diputados del miércoles último, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, consideró que el conflicto contractual de la mutual finalizará en favor de la organización.


Mientras se espera la presentación de la causa, la mutual junto a las diputadas de Libres del Sur Cecilia Merchán y Victoria Donda solicitaron al gobierno nacional la “inmediata separación” de ese comisario de la Policía Federal.


Además, durante la sesión del miércoles, todos los bloques apoyaron la presentación de un proyecto de declaración de Libres del Sur que repudia “la brutal represión contra los manifestantes de la asociación Mutual Sentimiento desatada por la Policía Federal” y solicita “un pedido de informes al Poder Ejecutivo para que aclare quién firmó la orden”.


La presentación judicial que se haría el lunes responde a las declaraciones de prensa del comisario Morales respecto de que el operativo realizado en Plaza de Mayo fue “de oficio”, es decir, sin orden de un juez. “Fue constatado por (el abogado de las 21 organizaciones que forman la mutual) Eduardo Soarez”, aseguró Graciela Draguicevich, presidenta de la mutual. Y agregó que “si el motivo del operativo fue el desnudo, es una falta contravencional por la que tiene que actuar un juez de la ciudad. La policía lo único que puede hacer es pedir a la gente que se cambie y labrar una multa. Pero no se paga con la cárcel bajo ningún punto de vista”.


Por ahora, la única causa abierta es la que está en el Juzgado Nacional del Menor Nº 7 –debido a que la policía detuvo a una persona menor de edad en el operativo del lunes– en la que los detenidos están acusados por “exhibiciones obscenas, lesiones, daños y resistencia a la autoridad”. Sobre esta última acusación, la presidenta de Sentimiento resaltó que “no puede haber resistencia a la autoridad cuando no hay ninguna orden de detención”.


En cuanto a la contravención por los desnudos, desde la mutual indicaron que presentarán una denuncia frente al Inadi, ya que se consideran discriminados tomando como referencia la inacción policial cuando el fotógrafo estadounidense Spencer Tunick realizó en 2002 unas tomas con 450 personas posando desnudas, en Avenida de Mayo y Bernardo de Irigoyen. Respecto de los dos policías heridos en la tarde del lunes, Draguicevich aseguró que “eran policías de civil que recibieron golpes de la Federal”.


Otra causa que se abriría próximamente, aunque no está definido si ante la Justicia penal o como presentación administrativa, es la que busca respuesta ante los golpes que recibieron en la Comisaría 2ª las diputadas Merchán y Donda, cuando fueron a visitar a los detenidos.


Durante la sesión de la Cámara baja del último miércoles, en la que Aníbal Fernández fue a presentar su informe de gestión, las representantes por Libres del Sur lo consultaron sobre el futuro contractual de la mutual. Según Merchán, Fernández apuntó que el conflicto que la mutual mantiene con la Administración de Infraestructura Ferroviaria (Adif) –una sociedad de Estado, dependiente del Ministerio de Planificación– por el edificio de seis pisos que las 21 organizaciones utilizan en la estación de trenes Federico Lacroze, en Chacarita, se va a resolver favorablemente para Sentimiento. “Hace siete meses que nos prometen la extensión del contrato, pero aún no sucede”, sentenció Draguicevich.


Informe: Nahuel Lag


http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-135207-2009-11-13.html

11.11.09

Los chicos, sin fondos


Sociedad-Página/12, 11 de noviembre 2009.- Más de quinientas organizaciones sociales bonaerenses lanzaron un comunicado en el que piden que en diez días se regularice el pago de los convenios acordados por el Ministerio de Desarrollo Social con hogares, jardines maternales y centros de día, juveniles y de atención integral. Según el colectivo, la deudas estarían perjudicando a 200 mil chicos asistidos por variados programas de la cartera. Las organizaciones llegarían a las dos mil.


“No se trata de una situación de emergencia, sino que son fondos que estaban pautados y la plata no está. Si no se comienza a pagar lo adeudado muchas organizaciones tendrán que comenzar a cerrar y desde el Estado no existen programas que contengan a los chicos”, explicó Laura Taffetani, integrante del Movimiento de los Chicos del Pueblo. Desde el Ministerio de Desarrollo no supieron precisar cuánta es la población afectada, pero aseguraron que “ya se está poniendo al día lo adeudado” y que “se espera terminar de cerrar los convenios” en el plazo dispuesto por las entidades de base.


Taffetani, dentro del movimiento que reúne a unas 300 organizaciones, es parte de la Fundación Pelota de Trapo, que tiene dos hogares en los que se les da reparo de la situación de calle a 57 chicos. Pero desde hace cuatro meses que no recibe fondos por parte del ministerio, al igual que otros 160 hogares. Mientras que otros 500 hogares aún no consiguieron renovar sus convenios, según Taffetani. “En lo que hace a niñez y adolescencia todos los programas están siendo incumplidos. Y es una situación grave, porque con los chicos hay un compromiso asumido de por vida, no se les puede decir que como no hay dinero hay que cerrar”, explicó.


“Las organizaciones que tenemos proyectos productivos podemos ‘pelearla’, pero las más pequeñas que trabajan en los barrios dependiendo de los subsidios, comienzan a cerrar”, agregó Diego Chichizola, integrante de Pelota de Trapo.


Tanto desde las organizaciones como desde el ministerio indican que uno de los problemas de los atrasos de fondos es el desfasaje producido por el recambio de autoridades entre el retiro de la cartera de Desarrollo Social de Daniel Arroyo y la llegada del actual ministro, Baldomero Alvarez.


Por eso, fuentes ministeriales indicaron que “están tratando de ordenar los convenios”. Aunque no profundizaron en detalles y resaltaron que “ya se comenzó a pagar” lo adeudado en los programas de Unidad de Desarrollo Infantil, pertenecientes a la Subsecretaría de Coordinación Operativa que contempla los centros de atención y los jardines maternales.


“Hay una diversidad de situaciones, de convenios sin renovar, que muestra un desorden muy grande. Por eso, éste es un reclamo por una política de infancia integral. Las organizaciones estamos asumiendo compromisos que le pertenecen al Estado y no podemos planificar ni organizar el trabajo por la falta de recursos”, apuntó Ana Gravia, coordinadora de la Red El Encuentro, que nuclea 28 organizaciones en José C. Paz, al oeste del conurbano.


Gustavo García es el director del Hogar Don Bosco de La Plata, donde veinte chicos que estarían en situación de calle rearman su historia. El hogar cuenta con los mismos problemas que el de la Fundación Pelota de Trapo por el adeudamiento del último bimestre de la beca. “El Estado al no pagar las becas está vulnerando los derechos de los chicos nuevamente, ya que en primera instancia no tiene políticas públicas de niñez que impidan que caigan en la pobreza. La única respuesta es la represión policial, la baja de imputabilidad”, sentenció.


Taffetani coincidió al asegurar que el gobernador bonaerense Daniel Scioli, “al pedir por la baja de imputabilidad, hace pensar a las organizaciones que el problema de la falta de políticas en niñez no está en una cartera ministerial. En lugar de pedir políticas para proteger a los chicos, pide políticas para protegernos de ellos”.


Por otro lado, en el ministerio aseguraron que de los 2275 millones de pesos presupuestados este año, se llevan ejecutados, aproximadamente, 1954 millones. El 8 por ciento respondería a inversión en programas sociales.


Informe: Nahuel Lag.


http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-135063-2009-11-11.html

10.11.09

Reprimir tampoco es un sentimiento

El reclamo en Plaza de Mayo para evitar el desalojo de una mutual incluyó el desnudo de algunos activistas. La policía interpretó que se trataba de exhibiciones obscenas. Hubo palos, forcejeos, gases y cuarenta detenidos.


Sociedad-Página/12, 10 de noviembre.-El día obligaba a llevar un accesorio además de la ropa. La lluvia reclamaba paraguas. Pero los integrantes de la Mutual Sentimiento habían prometido que “si llueve, la protesta igual se hace”. Entonces, cuatro integrantes de las veintidós organizaciones que trabajan en la mutual comenzaron a dejar sus prendas mientras marchaban en círculos en la Pirámide de Plaza de Mayo seguidos de otros cien integrantes. “Para que no nos dejen en ‘bolas’” denunciaban, en alusión al edificio de seis pisos, propiedad del Estado, en el que realizan tareas sociales y culturales, que ocupan desde hace diez años sin contrato y sobre el que pesa una orden de desalojo. Pero para el jefe de la Comisaría Nº 2 estaban realizando “exhibiciones obscenas” y ordenó un operativo policial que con palos y gases se llevó a cuarenta detenidos, entre ellos un menor de edad, por lo que la causa quedó abierta en el Juzgado Nº 7 de Menores. Las diputadas Victoria Donda y Cecilia Merchán denunciaron que fueron golpeadas cuando intentaron visitar a los detenidos y responsabilizaron al gobierno nacional por el operativo. Las personas detenidas quedaron libres horas después.

–¿Por qué se los llevan? Había mujeres y nenes –gritó uno de los integrantes de la Mutual Sentimiento. En ese momento, la marcha alrededor de la Pirámide de Mayo de cuatro integrantes desnudos y con caretas de cerdos, como protesta contra el desalojo del edificio en el que funciona la mutual, ya era historia. Una camioneta de la Policía Federal había entrado por tercera vez en la plaza. Se llevaban a los últimos detenidos.


–Había policías de civil, pero ningún fiscal. ¿Con qué orden te los llevás? –reclamaba otro de los manifestantes a uno de los responsables del operativo, apoyado sobre el cordón policial que con escudos y patadas permitía que se lleven a los detenidos que completarían las cuatro decenas. “Vamos a seguir peleando por los puestos de trabajo compañeros”, vociferaba Graciela Dravicevich, presidenta de la mutual, cuando le cerraron la puerta de la camioneta de la Federal en la cara.


Ella hablaba de las 95 familias que integran las cooperativas de trabajo que funcionan en el edificio de la mutual, en la Estación Federico Lacroze, y por los empleados responsables de que una mutual con cinco mil asociados atienda sin problemas en ese lugar, donde también se realizan talleres y actividades culturales. Todos, desde el 29 de julio, tienen un futuro incierto por una carta documento de desalojo que envió la Administración de Infraestructura Ferroviaria (ADIF), una sociedad de Estado dependiente del Ministerio de Planificación.


La respuesta a “¿con qué orden?” la dio Mario Morales, comisario de la 2ª: “Actuamos de oficio al constatar desnudos en una plaza pública. Se los detuvo por exhibiciones obscenas”, dijo, antes de escabullirse por el cerco que desde hace años divide la Plaza de Mayo y que los policías se encargaron de cerrar rápidamente para que ningún periodista continúe con las preguntas.


Manuel participa de la cooperativa Chispa del Sur y no para de restregarse la cara, dice que es por los gases que tiró la policía después de hacer un cerco alrededor de la marcha y un segundo cordón para que los fotógrafos no pudieran trabajar. Manuel tampoco se olvida de los palos y, según Ornela Nociti, abogada de los detenidos, “tres varones estaban bastante golpeados, un señor tuvo que ser derivado al hospital por un pico de presión y muchos presentaban raspones y secuelas por el gas pimienta”. Todos ellos deberán declarar en una causa caratulada como “exhibiciones obscenas, lesiones, daños y resistencia a la autoridad” en el Juzgado Nacional del Menor Nº 7.


Todavía en la plaza, se escuchaba un grito: “Todos a la segunda”. Manuel no lo pensó y empezó a caminar. Es que su novia Mónica es una de las detenidas. Abre un mensaje de su celular que le envió su novia y lo muestra: “Vamos a la Comisaría 2ª, llamen a los medios o nos cagan a palos”.


Los abogados ya estaban en la puerta de la comisaría y exhibían sus credenciales para poder entrar. La policía los dejó pasar entre escaramuzas. Las diputadas Victoria Donda y Cecilia Merchán, de Libres del Sur –organización que tiene actividades dentro de la mutual–, también ingresaron y recibieron golpes. Merchán mostraba la huella de una bota policial en su camisa blanca y dijo que “es una vergüenza que se reprima, justo, en ‘nuestra’ Plaza de Mayo. Exigimos una respuesta del gobierno nacional”. A Donda todavía le dolía el brazo y aseguraba que “ninguna protesta social justifica ser reprimida. Ni como ocurrió en Terrabusi o con los delegados del Subte. Pero, encima, esto es ridículo. Por qué no reprimen cuando se desnudan los modelos”.


Después de las 20, las personas detenidas comenzaron a ser liberadas. La Defensoría del Pueblo de la Ciudad abrirá un oficio contra la Comisaría 2ª porque “impidieron el ingreso de los abogados y autoridades”, explicó Graciela Muñiz, defensora adjunta.


Informe: Nahuel Lag


http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-135001-2009-11-10.html

9.11.09

Esa costumbre de reincorporar “héroes”

En lugar de apartarlos en oficinas y sin armas, el ministro de Seguridad bonaerense, Carlos Stornelli, ordenó reincorporar a los ocho policías. La noche de la desaparición estaban de guardia en el destacamento donde se probó que estuvo Arruga.


Sociedad-Página/12, 9 de noviembre de 2009.-Hace nueve meses, Luciano Arruga se convirtió en la cuarta persona desaparecida en democracia, luego de ser detenido en un destacamento policial de Lomas del Mirador, partido de La Matanza. Hace dos semanas, los ocho policías que el ministro de Seguridad, Carlos Stornelli, había pasado a disponibilidad en abril por estar investigados en la causa, fueron reincorporados en sus tareas. A principios de agosto, en una reunión con los familiares y abogados, Stornelli y el ministro de Justicia, Ricardo Casal, “aseguraron que se iban a respetar las medidas, pero los policías fueron reincorporados y no se nos notificó”, advirtió Vanesa Orieta, hermana de Luciano. Desde el ministerio aseguran que los policías “tienen derecho de ser reintegrados a sus funciones”.

Juan Manuel Combi, abogado del equipo de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) de La Matanza que representa a la familia del joven de 16 años, resaltó que se enteraron de las reincorporaciones cuando los policías “llegaron a las audiencias uniformados”.


Según el abogado, a los policías se los cambió de jurisdicción. La mayoría de ellos estaría cumpliendo servicio en Lomas de Zamora. Aunque uno de los oficiales continúa en la jurisdicción de La Matanza, consignado en un banco ubicado a cuadras de las casas de la madre de Luciano, de la de su hermana y de la de Combi.


“A nivel procesal no hay modificaciones porque los policías continuarán declarando. Pero la medida no es una buena señal por parte del ministerio. Pasarlos a disponibilidad había significado un castigo temporario ante una causa de desaparición de persona. Ahora, para la corporación policial es como si estuvieran perdonados”, resaltó Pablo Pimentel, presidente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) de La Matanza. “La gravedad es para los ciudadanos. Hay personas que se tienen que encargar de cuidarlos y están sospechados de torturar a un menor y después desaparecerlo”, apuntó Orieta.


La causa a cargo de la fiscal Celia Cejas de la UFI Nº 1 de La Matanza tiene trece cuerpos de expediente y 50 testigos, de los cuales más de la mitad son policías. Hasta hace dos semanas, los oficiales Damián Sotelo, Ariel Herrera, Daniel Vázquez, Sergio Fecter, Emiliano Márquez, Néstor Díaz, Hernán Zeliz y otro de apellido Borrego continuaban en “disponibilidad”.


Los ocho cumplían tareas en el destacamento de Lomas del Mirador la madrugada del 31 de enero en la que Luciano desapareció. Una pericia realizada con perros que buscaron el rastro de Arruga determinó que estuvo en el destacamento y en uno de los patrulleros.


“El móvil reconocido por los perros es el mismo que, según el registro de antena de los teléfonos, estuvo dos horas detenido frente a la Villa Santos Vega junto a otro móvil, cuando tenía que estar realizando un patrullaje por el barrio. Al evaluar el recorrido del patrullero, después del horario de la desaparición de Luciano, no se entiende por qué fue de una punta a la otra del distrito, pasando por cementerios y descampados”, indicó Combi. El abogado de la APDH también apuntó que las declaraciones de los policías del destacamento ante la fiscal de la causa “no coinciden”.


Otras de las pistas de la causa son los libros de registros allanados por la fiscalía en la seccional 8ª de Quintana, La Matanza, y del destacamento de Lomas del Mirador, que depende de ella. El peritaje lo está llevando adelante el licenciado Antonio Forte –perito que participó del caso Miguel Bru, el estudiante de periodismo de La Plata desaparecido en 1993, luego de ser torturado hasta la muerte en la seccional 9ª de La Plata– y según Combi se encontró con que los libros “estaban adulterados”.


Según Orieta, Luciano comenzó a “ser parado” por los uniformados del destacamento de Lomas del Mirador desde el día en que “rechazó la oferta de uno de los policías de trabajar en el delito para ellos”. En la causa, hay pruebas de una detención anterior al 31 de enero. Fue el 22 de septiembre de 2008, cuando mantuvieron detenido a Arruga en el destacamento ubicado en Indart 106, que no está preparado para eso ya que no posee celdas.


En sus declaraciones, los policías reconocieron que lo mantuvieron detenido en la cocina. Mientras que la hermana y la madre de Arruga aportaron los estudios del Policlínico San Justo, al que lo llevaron apenas lo retiraron del destacamento y donde se prueba que recibió una golpiza.


“Como familiares se nos trató mal y no se nos hizo firmar nada”, apuntó Vanesa. “Acá no te hicimos nada. Negrito de mierda, te vamos a llevar a Quintana (la comisaría de la que depende el destacamento) para que te violen, o terminás en un zanjón”, le habría dicho ese día uno de los oficiales reincorporados por Stornelli. Dos testigos que estuvieron detenidos en la seccional 8ª la madrugada del 31 habrían reconocido a Luciano en una foto y dieron testimonio de que fue torturado en una celda.


“Estamos juntando pruebas para llamarlos (a los ocho policías) a declarar a indagatoria por privación ilegítima de la libertad. Y hasta que terminara el proceso de instrucción, se nos había prometido que no iban a volver a trabajar”, advirtió Combi.


Desde el Ministerio de Seguridad se defienden con que “los ocho policías son sólo testigos y, con los elementos de prueba existentes y sin que variara su calificación en la causa, tienen derecho de ser reintegrados a sus funciones”.


Otro pedido realizado a las autoridades de las carteras de Seguridad y Justicia bonaerense y al municipio de La Matanza por parte de los familiares, amigos y la mesa de la APDH era el cierre del destacamento, que fue abierto tras el pedido de mano dura por la agrupación de Vecinos Alerta por Lomas del Mirador (Valomi), relacionada con la hija de un general acusado por la Conadep.


Para Pimentel, la falta de respuestas del gobierno bonaerense en el caso Arruga “tiene que ver con la estigmatización y subestimación de los pobres y los jóvenes. Parece que no vale igual la vida de un joven de la villa que la de un empresario o un futbolista”.


Informe: Nahuel Lag.


http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-134944-2009-11-09.html

5.11.09

Macri ya tiene sus “grandes hitos” en CD

Un juez que allanó las oficinas del organismo no pudo llevarse una PC. Ahora, su contenido fue enviado en forma anónima. Los documentos confirman que la Ucep actúa contra indigentes durante la noche. Sus principales operativos son mencionados como “grandes hitos”.

Por Nahuel Lag. El País, Página/12, 5 de noviembre de 2009.-La Justicia porteña tiene nuevos elementos para avanzar en la causa contra el grupo de choque del gobierno macrista denominado UCEP, que se encarga de “ordenar el espacio público” expulsando “indigentes” de la vía pública. Ayer, el juez Roberto Gallardo accedió a dos CD que contienen información de una de las computadoras de las oficinas que el organismo tiene en el Edificio del Plata y que había logrado ocultar en el allanamiento realizado el jueves por orden del magistrado. Los documentos a los que tuvo acceso Página/12 reafirman las denuncias que en las últimas semanas se hicieron contra la unidad de control que sigue operando en horas de la madrugada, la mayoría de las veces contra “asentamientos de indigentes”, y contiene un informe en el que se resaltan los “grandes hitos” realizados por el organismo y se proyectan objetivos para lograr mayor “eficiencia”. También se admite que las víctimas de los desalojos suelen ser familias enteras.


La prueba presentada ayer en el Juzgado Contencioso Administrativo Nº 2 se suma a la causa del amparo presentado por el asesor tutelar de Menores Gustavo Moreno ante el gobierno de la ciudad por el caso de Carla Baptista, la mujer embarazada que fue golpeado por integrantes de la Ucep el 2 de octubre. Según figura en el acta judicial, quien presentó las pruebas fue Miguel Varela, presidente de la Asociación Civil Manos Emprendedores y vecino de Baptista, a quien ayudó para que fuera la primera víctima en denunciar penalmente el accionar de la Ucep.


Los CD tienen gran cantidad de documentos internos sobre los operativos realizados por la unidad de control, incluso las resonantes de-salojos de la Huerta Orgamizka, en Caballito, y el desalojo del edificio de Paseo Colón, donde se expulsaron a 103 familias. Además, contienen planillas donde figuran las denuncias realizadas por funcionarios, directores de CGP y vecinos, a las que se le otorga orden de prioridad según quien solicite la intervención, en su mayoría contra “asentamientos de indigentes” (ver aparte).


“Informe de la Ucep” es una de las decenas de carpetas que contienen los CD entregados a la Justicia. Con fecha de julio, el informe de trece hojas tiene uno de sus puntos más llamativos en los “Grandes Hitos 2008-2009”.


En el apartado se puede encontrar una acción de enero de 2008 –cuando aún no había denuncias públicas del accionar de la Ucep– identificada como “Larrazábal” y que indica que “se desintrusó la zona. Había un total de 20 familias asentadas en la vía pública. Poseían frazadas, chozas, etc”. Y agrega que “intervino también la Policía Federal”. El segundo “gran hito” está fechado el 22 de febrero de 2008 y –paradójicamente– se realizó en La Pampa y Vías del Ferrocarril. Aquel día, los logros y el operativo fueron los mismos y también intervino la Policía Federal.


El informe continúa detallando los objetivos del organismo “a corto y mediano plazo”. A la brevedad, la Ucep –que está en la órbita del ministro de Medio Ambiente, Juan Pablo Piccardo– busca lograr “mayor exposición y comunicación de los operativos”. De todas manera, entre otro de los objetivos está el de “tener sensibilidad y precaución en cada operativo” y “cambiar la imagen de la unidad, refiriéndose al aspecto dado por los medios”.


Aunque en los CD se pueden observar varias listas en las que se registra el “stock de denuncias” realizadas por vecinos, directores de CGP y funcionarios –de los cuales muchos quedaron resueltos como “exitosos”–, los objetivos a mediano plazo del informe apuntan a “tramitar una mesa de entradas” y “atender con mayor agilidad y eficiencia a los reclamos ingresados”.


Como informó Página/12 la semana pasada, desde enero y hasta septiembre de 2009 la Ucep realizó 444 procedimientos, de los cuales sólo nueve no fueron contra indigentes. Aunque entre los documentos aparecen fotos de remoción de carteles, como había indicado Piccardo sobre las tareas de la Ucep, las acciones contra indigentes continuaron. También aparecen fotos donde hay niños en los procedimientos.


De la lectura de los documentos se pueden encontrar 27 operativos realizados en octubre. En todos los casos se dispuso la intervención de 25 agentes acompañados por un camión compactador (número de patente HIC 414). De ellos, sólo seis se realizaron entre las 21 y 00 para “observar el desempeño de los recicladores y cartoneros” en la zona del microcentro. El resto de los operativos se realizó en horas de la madrugada y en busca de “personas asentadas sobre la vía pública”. Sólo en tres casos se informó que “no se encontró asentamiento”.


En el resto de los casos, “se los instó (a los indigentes) a desocupar dicho espacio público y se procedió a restituir a su estado original”. Ese “estado original” toma mayor significado con frases como “poseían colchones, frazadas y carros tipo supermercado” junto a la presencia del camión compactador.


La información a la que accedió Gallardo también cuenta con la nómina de todos los agentes pertenecientes a la Ucep, entre los que se nombra a Luis Savoiardo como agente coordinador de operativos y en uno de los documentos se lo identifica como “Tano”. Además, en otro documento con el membrete del gobierno porteño se comunica la autorización de algunos de esos agentes para utilizar algunas de las camionetas identificadas en otros operativos.


http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-134739-2009-11-05.html